Para alegría de quienes gustamos del estilo de Wes Anderson, se estrenó su más reciente film, que sigue a Zsa-zsa Korda (Benicio del Toro), un magnate europeo que se caracteriza por haber sobrevivido a varios intentos de asesinato. Korda quiere cambiar su vida y por eso nombra a su hija Liesl (Mia Threapleton), una joven novicia, como su única heredera, lo que desata conflictos con sus otros hijos (nueve en total). Todo se complica, porque ambos se ven envueltos en una intrincada trama de espionaje, negocios internacionales y dilemas morales en una Fenicia utópica ambientada en los años 50.
Y como ya es característico Anderson, en esta película podemos distinguir el su sello con sus planos simétricos, paletas de colores cuidadosamente elegida, además el guion que escrito por él mismo trata temas como: el poder, la lealtad, la religión, la redención y las relaciones familiares disfuncionales.
Con un gran elenco, encabezado por Benecio del Toro, que está muy bien como Korda y Mia Threapleton (Hija de Kate Winslet), realiza una buena actuación como Liesl, es una novicia atípica y Michael Cera como Bjørn Lun, el tutor de los hijos de Korda, un personaje que va creciendo, a medida que se desarrolla la trama. También, aparecen Tom Hanks, Scarlett Johansson, Willem Dafoe, Benedith Cumberbatch y Bryan Cranston, varios de ellos ya han trabajado anteriormente, con Anderson.
Con ironía, humor negro y una dosis de melancolía, en esta película podemos encontrar muchos aspectos recurrentes en la cinematografía de Anderson, es muy fiel a su estilo, lo que la hace muy disfrutable. A esta altura el director, hace las películas que quiere, junto a sus actores fetiches y ojalá lo siga haciendo.
Se estrena en cines el 5 de junio.
Director: Wes Anderson.
Duración: 90 Minutos.
Distribuye: Andes Films.